¿Lo que tengo es ansiedad?
Para responder a esta pregunta, te dejo un pequeño cuestionario:
- Te cuesta vivir el presente.
- Sentís que tu mente va hacía adelante y luego hacia atrás como un péndulo incontrolable que no se detiene.
- Te resulta difícil concentrarte en el aquí y ahora.
- Constantemente estás pensando en todas esas cosas que no salieron como querías, o que tenés pendientes.
Si respondiste que sí a una o más te estas afirmaciones, y sentís que es algo frecuente que afecta tu día a día, probablemente sí, estés sufriendo de ansiedad. Te recomiendo seguir leyendo para entender mejor el mecanismo que se activa en la mente para que entre en juego lo que llamamos ansiedad, y así puedas saber cómo abordarla.
Desde el psicoanálisis, la ansiedad se concibe como «el resultado de la percepción (consciente o inconsciente) ante una situación de peligro» (Freud, 1964). Es una respuesta no realista ante una situación temida. ¿No realista? Sí, porque es una percepción, una interpretación de esa realidad. La ansiedad está en tu cabeza, es producto de un mecanismo interno: la mente queda anclada en un pasado frustrante, o bien se anticipa a un futuro que no llega.
Estos pensamientos generan frustración e impotencia, porque son deseos o expectativas que no logramos llenar: no pudimos con eso y pensamos qué hacer en un futuro. Ahí es donde tu corazón se acelera, tu mente no llega abarcar todo y tu nivel de ansiedad sube.
Cuando la ansiedad ataca es porque en tu mente se pelean el Yo y el Super Yo. Por ejemplo, El Yo es quien percibe tu escritorio lleno de trabajo pendiente y tu Super Yo quien te dice: “Uhm, ya deberías haber terminado”.
El Super Yo es una parte de tu mente que se nutre de los mandatos sociales, tu crianza y tus valores personales. Podríamos decir que es tu consciencia moral. Te habla y te dice cómo deberías sentirte, qué deberías haber hecho, que esperan los demás de vos, etc. Es un filtro entre entre la consciencia y el inconsciente, lo que mostras y lo que ocultas. La ansiedad se desencadena cuando tu Super Yo no esta de acuerdo con lo que estas mostrando.
Ahora te pregunto: Vos… ¿cómo quisieras verte? Muchas veces la ansiedad aumenta porque estamos pendientes de lo que los otros quieren para mi o de lo que otros esperan de mi. Es cuando el Super Yo se personifica, por ejemplo en tu jefe o en tu mamá.
Disminuir la ansiedad es encontrar un equilibrio entre los demás y vos, es centrar la mente en el presente. Y para eso nada mejor que preguntarte: ¿Qué podés hacer hoy? ¿Qué está a tu alcance? ¿Qué querés hacer y qué no?
La ansiedad como cualquier otro síntoma, si bien es una señal de que algo no está bien también es un desafío para conocerte más y entender que te está pasando.